20 de Nov
He estado sin ganas de escribir. No sé, ando motivada con muchas cosas menos esta. Es que ya no sé qué más decir...
Muchas cosas han cambiado este último tiempo, muchas para mejor. Aunque también otras siguen igual de mal.
El otro día sacando fotos en un evento volví a hablar sobre ti, fue un sabor amargo. Volví a contar lo enamorada e ilusionada que estuve por mucho tiempo... Lo feliz y proyectada que me tenías hasta que todo se volvió turbio y lleno de historias que nadie te va a creer, o por lo menos yo nunca creeré.
Volví a sentir ese nudo en la garganta al contar que ya no estabas en mi vida, al recordar que también quisiste coartarme toda manera de poder saber de ti y como dije en el texto pasado, está bien, no le quiero dar vueltas al tema... razones debes haber tenido para tomar esa decisión y no la voy a interrumpir.
Hoy he comenzado una nueva vida, lejos de la gente que quiero.. bueno, no de todas, pero de la gran mayoría. Es raro... conozco a la perfección esta ciudad pero aún así me siento una turista, tengo ganas de salir a fotografiar y caminar y recorres sus calles.
Probar lugares nuevos de comida y no necesito compañía para hacerlo, tampoco tengo mucha gente que me pueda acompañar. Pero está bien, me acostumbraré. Además, estoy cerca de una de las personas más importantes en mi vida y eso me ayuda a no sentirme tan sola. Ella me da el cariño y apoyo que necesito para seguir adelante.
Decidí volver a dejar de comer carne, total... eso lo había empezado a hacer por ti y de a poco quiero dejar el pollo también. Volví a salir a andar en bici, a disfrutar de la luna y de las noches cálidas o frías, espero que eso no cambie, me hace bien.
Sé que en algún momento volveré a sentirme plena, ya estoy en camino a lograrlo. La psicóloga me volvió a decir que quiere darme el alta, pero aún no quiero, no siento que sea el momento para dejar de conversar con ella sobre algunos temas, menos ahora que se vinieron muchos cambios de una.