A base de mentiras
Es costumbre reanudar los pensamientos para no agobiarse, pero no sé que hacer si lo único que hace es explotar mi cabeza con su manía de entrometerse en mi espacio, mi gente, mi vida.
Al otro lado de la vida logro dimensionar todo lo que se refiere a ser indiferente, fría, a lo que es que nada interrumpa tu manera de ver las cosas.
Lo siento... pero no logro no sentirme incómoda con la situación, por mas que intente, todo termina en donde comenzó. En los momentos en los que más te necesitaba y no estabas, en los momentos en los que hablar quería pero tu no escuchabas, en los momentos donde la verdad saludaba al silencio y la mentira retumbaba en los oídos de quien quería escuchar.
Los pasos se daban temerosos, las manos ni se querían tocar. Era tanto el desasosiego, que una sensación de asco amenazaba con terminar con la situación, que se transformaba en rutina... a base de mentiras.